jueves, diciembre 31, 2015

Un detalle de fin de año

Se acaba 2015 y, con la llegada de 2016, se marchan muchas cosas que han irrumpido en mi rutina y que me han dejado un estupendo sabor de boca. Una de ellas ha sido la inmersión en el mundillo de los cursos online gratuitos, de los cuales ya he completado dos hasta la fecha. El primero de ellos, "Start Writing Fiction", no sólo supuso una excelente toma de contacto con este formato didáctico, sino que dejó tras de sí una pequeña batería de textos, desarrollados en mayor o menor medida, que componen el grueso de ejercicios de redacción completados a lo largo de las ocho semanas de curso.

Para despedir el año, y con la intención de arañar un poco el objetivo propuesto para este año en el blog (intentar establecer una periodicidad mínima, llegando a una media de post por mes), incluyo aquí la traducción de uno de los ejercicios que desarrollé durante el curso. Os invito a que hagáis todo tipo de sugerencias constructivas sobre el texto. Notaréis algunas frases un poco chirriantes por forzar la literalidad con el texto original, redactado en inglés: razón de más para agradecer fórmulas que se os ocurran para pulir el fragmento.

El profesor Linievsku estaba trabajando en su oficina, como siempre hacía después de sus clases. El hombre no sabía a qué hora se considera racional abandonar la universidad porque siempre tenía un artículo que completar o un trabajo que calificar, así que resultaba más bien difícil mantener una conversación casual con él, referente a un trabajo grupal o a un tema interesante de una de sus clases, yendo de camino al aparcamiento. A decir verdad, él no iba al campus en coche, ya que siempre dejaba su oficina después de que el parking hubiese cerrado.

Cuando llegué a la puerta de su oficina, toqué suavemente sobre el cristal con su nombre extranjero pegado justo en el centro. El sonido difuso de su voz invitándome a entrar, sumado al exotismo de su nombre europeo flotando ante mis ojos, me hizo sentir como un estudiante de intercambio en una universidad lituana.

El profesor me miró con una sonrisa dibujada en la cara y me invitó a sentarme frente a él. Sus manos gesticularon dicha invitación, y acto seguido volvieron a las páginas escritas en las que estaba trabajando. Cuatro segundos más tarde se detuvo abruptamente, mirando al infinito, y después levantó la cabeza y me miró directamente a los ojos.

"¿Quién eras tú, perdona?", preguntó distraído.
"Soy William, señor, de la clase de Física Avanzada".
"¡Ah, sí, y tanto que lo eres!", exclamó con profusión, "me cuesta tanto después de tantos años, con tantos nombres americanos y tantas caras...".

Sonreí condescendiente. Resultaba como mínimo gracioso pensar que semejante eminencia en el campo de la física, conocido también por su meticulosa labor como historiador, fuese tan malo recordando nombres de gente que veía a diario. Mi ausencia en su memoria era incluso más alarmante de lo normal, sabiendo cuán relevante era para su seguridad y bienestar aquello que yo había descubierto aquella mañana en la oficina del conserje...

martes, diciembre 08, 2015

Otoño errático tras el verano errático

¡Buenas a todos!

Aquí estoy de nuevo, después de tres meses callado. Meses en los que han pasado unas cuantas cosas, de las cuales vengo a hablar hoy.

En primer lugar, escribo esta entrada como parte de una lista de tareas que he completado casi en su totalidad entre ayer y hoy que incluía, entre otros ítems, terminar el curso de escritura creativa que mencioné en mi última entrada. "Start Writing Fiction" terminó oficialmente la semana pasada, pero yo lo he completado hoy, con un par de días de retraso. El trabajo de las últimas sesiones ha sido muy denso, puesto que he concentrado en pocos días naturales la labor que teóricamente habría desarrollado a lo largo de varias semanas. Aun así, he sido honesto en cuanto a realizar las tareas escritas y he completado poco a poco la "to do list" del curso hasta llegar hoy al 100% de progreso. El resultado final del curso ha sido, aparte de una serie de ejercicios intermedios que compartiré en próximas entradas, un borrador de relato corto que ha pasado ya por una fase posterior de edición y de revisión por parte de participantes en el curso. El relato ha sido mucho más gratificante en su forma final de lo que esperaba llegar a producir como parte de los deberes propuestos en la web, del mismo modo que varios de los contenidos han superado con creces las expectativas que me había formado al inscribirme en octubre.

Así he descubierto cosas que desconocía, como la novela "Jazz" de Toni Morrison (parte de una trilogía que ahora quiero leer), a la par que contenidos de cuya existencia era consciente pero que no había localizado previamente de una forma compacta o condensada, como una serie de consejos y pautas para dar formato a los textos que presente para diversos fines (siguiendo estándares británicos, claro, aunque me parecen muy universales). Desde luego, para ser un curso gratuito está muy bien y me ha convencido para probar con más cursos en adelante.

En segundo lugar, hilando con el primer punto, he empezado un nuevo curso de FutureLearn: "Starting a Business 1: Vision and Opportunity". Es el primero de una serie de cursos de dos semanas de duración relacionados con la creación de un negocio. En mi "libreta para atrapar planes y/o ideas de futuro", ser propietario de negocio figura en la lista de proyectos posibles para un futuro y sigue en pie mi intención de hacer cursos online como complemento para mi formación personal/profesional. Todo esto mientras busco un trabajo al terminar de estudiar, luego estoy trabajando en crear ese hábito de formarme transversalmente desde ya.

En tercer lugar, ha terminado noviembre, lo que me lleva a sumar otro reto de NaNoWriMo superado a mis espaldas. Por segunda vez consecutiva he llegado a las 50 000 palabras, solo que esta vez lo he hecho en inglés. :) Estoy especialmente orgulloso de dicho logro, si bien es cierto que hice un poco de trampas ya que escribí en inglés prescindiendo de usar contracciones con el propósito deliberado de rascar palabras allá donde pudiese... Pero jamás había intentado escribir algo tan largo en inglés y, siendo la primera vez que lo intentaba, completar dicho reto con éxito me ha resultado gratificante a más no poder.

Debo puntualizar, eso sí, que me estoy planteando seriamente hasta qué punto NaNoWriMo es beneficioso para mí. Por un lado estoy muy satisfecho porque estoy generando borradores de 50 000 palabras a ritmo anual, pero durante noviembre anulo cualquier otra prioridad o la minimizo muchísimo, con la consiguiente repercusión negativa en mis logros académicos (¿laborales en un futuro?). Por otro lado está el hecho ineludible de que ambos retos han consistido en escribir borradores de historias diferentes que, por ahora, siguen inconclusos. No me parece bueno vomitar borradores que no llegan a ninguna parte, puesto que no veo mucha diferencia entre esa semiproducción literaria y no terminar un relato de dos páginas. Salvando los totales de palabras, el logro es el mismo. Por eso quiero plantearme ahora la posibilidad de convertir NaNoWriMo no en una obligación anual que me absorba por completo, sino en una etapa que he desarrollado durante estos últimos dos años en vistas a desarrollar un hábito constante de escritura. Un hábito que recoja, por ejemplo, la edición y revisión de mis manuscritos producidos hasta la fecha, así como una posible iniciación a la escritura como profesión (perdón por la osadía).

Por último, no debo olvidar mi situación universitaria: estoy inmerso en la realización de mi PFC, si bien el progreso global es menor de lo esperado. He hecho correcciones periódicas con mi tutora y sigo adelante con el trabajo, pero aún no ha tomado tanta forma como me gustaría. Aun así, no pienso tirar la toalla y, ahora que ha terminado NaNoWriMo, tengo más tiempo aún para dedicarle. Más me vale aplicarme a conciencia.

Lo voy a dejar aquí por ahora. No olvido mis listas de tareas pendientes, acumuladas a lo largo de los años, pero no pierdo la esperanza de cumplir mi palabra (antes o después).

Espero que esta lectura os haya resultado interesante. Como ya comenté anteriormente, estaré encantado de responder a cualquier duda o cuestión que queráis plantearme a través de los comentarios.

Un saludo a todos.