sábado, marzo 20, 2010

Las familias

Hoy he vivido una experiencia muy desagradable en casa de una amiga. Algo que me ha pillado totalmente desprevenido y que me ha dejado muy mal sabor de boca durante el resto del día, incluso ahora. No voy a explicar qué ha pasado, pero sí diré que se trata de "asuntos familiares"... y que esto es algo que a mí personalmente me revuelve el estómago.

Nuestras familias. Todos tenemos una. Y todas las familias, sin excepción, tienen lo que se conoce como "trapos sucios": aspectos oscuros que se guardan y que no tienen por qué trascender al dominio público. La confianza, sin embargo, hace que, de vez en cuando, estos trapos sucios se den a conocer a ciertas personas por tal o cual motivo... y es entonces cuando nos damos cuenta de muchas cosas: que la familia de Fulanito no es tan "perfecta" como la imaginabas, o que definitivamente tu familia comparada con la de Menganito es un coro de santos y ángeles...

Tengo la sensación de que todas las familias hacen muchas cosas mal. Cada una a su manera o en ámbitos distintos, pero todas meten la pata en cosas. Algunas en la mala gestión de la economía, otras en el pasotismo para con los hijos, otras en la perversión (los abusos sexuales, el maltrato, ...), otras en un cocktail de todo.

Y, lo que en mi opinión es la gota que colma el vaso, es que todo es culpa nuestra. Porque todos aquellos que forman una familia lo hacen pensando en un nucleo familiar feliz digno de un anuncio: padre y madre guapos, jóvenes y sanos con niños pequeños risueños que no tienen sobrepeso (no como un porcentaje grandísimo de los menores actualmente)... Nadie que vaya a formar una familia piensa "quiero tener un hijo drogadicto" o "ojalá mi marido abuse de mi hija sin que yo me entere". Todos queremos tener una familia perfecta. Y ninguno la tenemos. O ninguno la consigue.

¿Por qué? ¿En qué momento las cosas se tuercen? ¿En qué punto la falta de comunicación, o la falta de dinero, o el exceso de responsabilidades, merman tanto la estabilidad familiar que surgen unos conflictos repugnantes que cada hogar debe esconder? ¿Me pasará eso en un futuro, cuando forme mi propia familia? ¿Tendré hijos que se maten a golpes entre ellos o que caigan en coma etílico antes de los 15 años?

Nunca conseguiré respuestas. El ejemplo más claro está en mí mismo: no he probado un cigarro en mi vida... pero en mi familia fuma hasta el apuntador. Y yo ni siquiera he tenido intención jamás de probarlo, pero mi hermana aún es menor de edad y lleva años fumando. Mis padres lo saben, pero no se lo han impedido porque saben que ellos hicieron lo mismo (algo que, al menos a mí, no me parece una excusa suficiente). ¿Por qué soy el único que no fuma ni tiene intención de hacerlo? ¿Por qué soy la única persona en mi familia que ha ido a la universidad (excepto mi tía)? ¿Cómo demonios he salido entonces yo así? ¿Alguien lo sabe?

"Los amigos son la familia que uno elige". E incluso en estas familias habrá trapos sucios: unos te traicionarán, otros te abandonarán, tu mejor amigo se liará con tu mejor amiga mientras ella es novia de otro amigo tuyo... Y no podrás renunciar a ellos porque, si no aceptas a tu familia porque no te sientes parte de ella, negando también a tus amigos te quedarás solo.

Mi primer encuentro con la familia de mi amiga ha sido lo más desagradable que me ha pasado en mucho tiempo. Lo lamento por ella, lo lamento por mí por haber estado en el sitio equivocado en el momento equivocado... Y lamento también que Plauto y Hobbes estuvieran en lo cierto, y que el hombre sea un lobo para el hombre.

Qué fácil es, durante un breve periodo de tiempo, perder la fe en todo lo que nos rodea...

10 comentarios:

Q dijo...

I think that because people aren't perfect, families aren't perfect. I know mine isn't. People can only do their best to raise their children--and as for your worries about your own future family, I think your best will end up imperfect, but just fine for the most part.

Adri Phaustho dijo...

You're right, Q. I knew it was right even before I wrote the post.

But it doesn't matter: it won't make me stop feeling so frustrated about this fact.

And that's the worst thing of all, don't you think? That we can't aspire to be -emphasize this part- relatively perfect...

Q dijo...

Oh, we can aspire to be perfect. I think that's what causes goodness in the world. Chances are excellent that we'll make mistakes, but we can try not to.

Adri Phaustho dijo...

...Touché.

It's always good to argue with alphabet letters like you, =)

Lola Mariné dijo...

Adri, la familia es una micro-sociedad con sus cosas buenas y malas, y encima nos viene impuesta, no la elegimos como a los amigos o la pareja. Es natural que haya roces y rencillas, incluso rupturas.
No confies en la familia como el gran pilar que te sostiene, es una falacia.
Si eres distinto a toda tu familia, mejor, eres un encanto.
Besos.

Adri Phaustho dijo...

Gracias por tus palabras, Lola. Tienes toda la razón en lo que dices.

¡Un beso!

Maritoñi dijo...

Yo la verdad, es que en mi familia hay muchos secretos, a pesar de que he revelado gran parte de ellos en mi blog.
Los secretos producen conflictos familiares?

Adri Phaustho dijo...

En ocasiones pueden producirlos... aunque yo, en esta entrada, el enfoque principal que le he dado al asunto es que los conflictos familiares son esos secretos (los trapos sucios, vamos).

¡Gracias por tu comentario sobre el tema, Maritoñi!

Jésvel dijo...

Bueno, nadie es perfecto y, ya sabes, "hay gente p'a t'o"

Todos tendemos a creer en que podemos ser perfectos y en que los demás han conseguido serlo.

Claro que también la naturaleza tiende a la perfección y...

"Er mundo e' ansí"

Adri Phaustho dijo...

Eso me temo, Jésvel: para bien o para mal.